25 octubre 2008

Cambio de hora.

Llega uno de los momentos más esperados del año. El cambio de hora. Siempre con la misma historia. Hay varias cosas de este día que siempre me tienen intrigado. Y son las frases típicas que nos acompañan durante los días previos y posteriores al dichoso cambio. Por ejemplo:

- ¿Hay que adelantar o atrasar la hora?
- Ahora, ¿se hará antes de noche o no?
- ¡Que bien dormiremos una hora más!, o ¿es menos?
- Son las 5, las 6 de antes.

Cuando como en el caso de este mes hay que atrasar la hora, siempre se piensa que dormiremos una hora mas. Erróneo. ¿Quien duerme una hora más? Nadie, más bien al contrario. En el caso de que te toque trabajar esa noche, terminarás una hora más tarde y posiblemente no podrás conciliar el sueño. Si trabajas de mañana lo más normal es que debido a la excitación del momento, pensando en que dormirás una hora más, tu reloj biológico te despierte una hora antes e intentando volver a dormir esa hora que te queda, te levantes más hecho polvo que un día normal. Y para el resto de los mortales que descansan en fin de semana, se despertarán cuando se cansen de dormir, es decir dormirán igual que cualquier fin de semana, o cuando los niños, acostumbrados a levantarse siempre a la misma hora, invadan de forma violenta su habitación para no dejarles respirar. Total, que en lo único que verdaderamente tiene una repercusión este cambio de hora es en la sensación de que el invierno esta aquí y la Navidad asoma las orejillas, avisándonos de que este año los Reyes vendrán más pobres que nunca.....
Por cierto, ¿alguien hace bien el cambio de hora?, es decir, ¿se levanta a las 3 para ponerlo a las 2?

1 comentario:

mamarracho dijo...

Yo lo puse al momento, pero no porque me levantase sino porque estaba de fiesta jeje.

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