28 enero 2010

Cosas que se van perdiendo…

Hacía ya mucho tiempo que no necesitaba enviar una carta a través del correo convencional, últimamente todo era solucionado mediante e-mails y teléfono. Hoy he tenido que utilizar este ancestral método para hacer llegar unos documentos y cual es mi sorpresa que, al intentar pegar el sello, no noto ese asqueroso sabor tan característico al pasar la lengua por el anverso del mismo. Y es que hasta eso nos lo están quitando. Ahora llevan incorporado el adhesivo y ya no hace falta chuparle el culo al Rey. ¿Será un invento Republicano?

1 comentario:

mamarracho dijo...

El mundo se viene abajo. Sí es que...

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